TELESUR: ASÍ SE PARIÓ LA REVOLUCIÓN

 

Por Teodoro Rentería Arróyave

 

11 de agosto de 2015

 

COMENTARIO A TIEMPO

 

PRIMERA PARTE

 

TELESUR, hoy por hoy la televisora más libre del Continente con cobertura internacional, en su X aniversario es de precisarse que ha cumplido a cabalidad con su compromiso revolucionario y es de resaltarse la maternidad o paternidad, como se quiera, de nuestra Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP, su presidente, el reconocido colega argentino, Juan Carlos Camaño, así relata el parto histórico:

 

“Alguna vez prometí –no recuerdo si sobrio o no– contar la génesis de Telesur. El problema radicaba –cuando hice esa promesa– en que a Telesur le habían salido tantas madres y padres que dejaban como falsa aquella sentencia de mater sempre certa… Es que ni siquiera puedo hablar del nacimiento de Telesur sin faltar a la verdad. Porque Telesur ni siquiera existía en nuestras calenturientas mentes. Lo del nombre digo. Pero la idea sí, claro, a pesar de lo extraño del reconocimiento de paternidades –cosa que me han dicho–, no es común en nuestro continente, salvo en las telenovelas.

 

Resulta que al gremio de periodistas de Cuba, allá por noviembre de 2000, se le dio por rescatar la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP, y organizó un congreso en La Habana. Y al mismo concurrimos “apenas” unos 450 periodistas y comunicadores sociales de toda América, incluidos compañeros de Estados Unidos y de Canadá.

 

En ese congreso confluimos mucha gente, entre ellos los que nos habíamos desencontrado durante demasiados años. Y los desayunos del hotel Palco –y las sesiones y conversaciones de pasillo en el Palacio de Convenciones- sirvieron para reanudar viejas complicidades y amistades. Fue tanto el trabajo que Compay Segundo no cantó al final del congreso: todos querían hablar aunque algunos insistíamos en que no había nada más importante que escuchar, por primera y última vez en vivo, al veterano sonero.

 

Pero allí estaban los anfitriones Tubal Páez y Pepe de los Santos para ponernos en el orden del día, en una reunión tan formal como informal, en la que Fidel se despachó en los pasillos con informaciones y declaraciones que sorprendieron a muchos, entre ellos los argentinos Quique Pesoa, Ana de Skalon y su consorte Miguel Bonasso, con quien habíamos compartido en 1973 la experiencia de Noticias, en Buenos Aires.

 

Allí recomenzamos a recitar nuestros argumentos de la necesidad de una integración comunicacional pero, en realidad, lo que hicimos, durante horas y horas los 400 y pico de periodistas fue repetir un diagnóstico de la información y la comunicación en América Latina.

 

Al final del congreso, y mientras Compay Segundo dormía en los bancos, era hora del cierre de Fidel. Pasada la medianoche, casi todos estábamos reventados: cansados y semidormidos, cuando sin consideración ninguna, el presidente cubano nos despertó con una frase que yo recuerdo que sonaba como esta: “Ustedes se pasaron tres días haciendo diagnósticos sobre nuestra realidad a nivel comunicacional, hablando de revolución. De ese tema, compañeros, nosotros sabemos casi todo… Pero ninguno de ustedes hizo alguna propuesta… a nadie se le ocurrió, por ejemplo, crear una CNN latinoamericana…”. Logró semidespertarnos, y muchos le respondimos con una larga carcajada: ¡qué ocurrencias tiene este Fidel!” CONTINUARÁ.

 

Periodista y escritor; Presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE; Secretario de Desarrollo Social de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP; Presidente fundador y vitalicio honorario de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, y miembro del Consejo Consultivo permanente del Club Primera Plana. Agradeceré sus comentarios y críticas en teodoro@libertas.com.mx,  teodororenteriaa@gmail.com Nos escuchamos en las frecuencias en toda la República de Libertas Radio. Le invitamos a visitar: www.felap.info, www.ciap-felap.org, www.fapermex.mx, y www.clubprimeraplana.com.mx nos escuchamos en todas las frecuencias de Libertas Comunicación en toda la República.