MÉXICO, EL MÁS PELIGROSO

Por Teodoro Rentería Arróyave
5 de febrero de 2009

No obstante que en los meses recientes de diciembre y enero de 2008 y estos primeros días de febrero no hemos tenido que lamentar otra víctima mortal del periodismo, México sigue siendo el país más peligroso para ejercer periodismo en América Latina, según la apreciación del la llamada Federación Internacional de Periodistas con sede en Ginebra, Suiza.

Nosotros con todo el trabajo gremial acreditamos que nuestro país ocupa el primer lugar en el mundo en asesinatos, desapariciones forzadas y demás atentados a periodistas y sus medios, sólo por debajo de Irak, que es un caso sui generis por tratarse de una nación que sufre de una guerra de intervención por parte del imperio cuando era comandado por el criminal de lesa humanidad, George W. Bush.

Sus cifras, como siempre sucede con estos membretes, son sesgadas porque no se basan en el trabajo profesional de los gremios de las áreas afectadas ni en las organizaciones locales como son, en este caso, la Federación Latinoamericana de Periodistas FELAP, de sus agremiados Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, y del Club Primera Plana, CPP.

Según esa organización son 10 periodistas mexicanos asesinados en 2008, un aumento, agrega, sobre seis respecto al año anterior, pese a que la cifra de informadores muertos en el mundo descendió respecto de 2007. Esto último es cierto.

Donde falla es que según nuestros documentos perfectamente acreditados las víctimas mortales en el 2008, fueron 12, de los cuales fueron 11 informadores y un modesto trabajador de prensa.

La mencionada Federación Internacional de Periodistas, no menciona nada sobre las 2 desapariciones forzadas en ese mismo años de 2008, que aunadas a las anteriores son 9 la familias que viven la incertidumbre de no saber el paradero de sus seres queridos.

El 13 de febrero de 2008, Mauricio Estrada Zamora reportero del periódico La Opinión de Apatzingán, Michoacán, desapareció y desde entonces se desconoce su paradero y no se ha informado de algún llamado de sus posibles secuestradores.

El 24 de junio de 2008, al igual, José Carlos Campos Esquerra, reportero del periódico El Debate de Culiacán, Sinaloa, desapareció y no se sabe nada del colega. Se había mantenido en secreto su desaparición con la esperanza de que sus plagiarios entraran en contacto con los familiares, cosa que nunca ocurrió.

Con respecto al año anterior, 2007, también la información no se ajusta a la realidad, puesto que fueron asesinados 10 colegas, es decir 2 menos que en 2008.

Efectivamente, México es el país de América Latina, pero también del mundo, el más peligroso para ejercer el periodismo, por una sólo razón que también se soslaya: por la vergonzosa y vergonzante impunidad imperante en nuestra nación. En conclusión, México es el país más peligroso para ejercer el periodismo en el mundo.

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